Los usuarios de Windows deben poder ejecutar sesiones simultáneas sin interrupciones ni conflictos. Las aplicaciones deben ...

Los usuarios de Windows deben poder ejecutar sesiones simultáneas sin interrupciones ni conflictos. Las aplicaciones deben garantizar que cuando se ejecutan en varias sesiones, locales o remotas, la funcionalidad normal de la aplicación no resulta afectada. La configuración y los archivos de datos de las aplicaciones no deben persistir de un usuario a otro. La privacidad y preferencias de un usuario deben aislarse a la sesión del usuario.